Schumann-Nägler

Diseño de etiquetas de vino

Para ampliar el negocio internacional de Schumann-Nägler necesitábamos algo más que su fantástica herencia, que se remonta al año 1438. Necesitábamos algo que combinara lo moderno con lo tradicional. ¿Nägler? Un clavo. Único en su forma: clavado en la botella y la etiqueta, representa la absoluta determinación de crear algo especial y la extrema calidad que los dos hermanos Philipp y David exigen a sus vinos. Porque tiene que hablar por sí mismo, toda la serie se ha mantenido en un gris piedra puro y un minimalismo absoluto, con una excepción. El escudo dorado de la familia se aplica con un sello de latón especialmente tridimensional.